12. Cristo Joven

Ven hermano y cántale a Cristo
a ese Cristo joven que un día nos redimió,
haz de tu amor una plegaria,
un simple canto alegre que el Señor escuchará.

Ven aquí, canta ya,
no te olvides tú de Cristo.
Piensa que en la cruz
por nosotros Él se dio, por amor.


No te alejes del camino marcado,
que Cristo ha señalado para acercarnos a Él,
devuélvele con fe inquebrantable
el amor incuestionable que nos ha ofrecido El.