3. Qué lindo llegar cantando

Qué lindo llegar cantando
a tu casa Padre Dios,
y hermanados en el canto
comenzar nuestra oración.
Darte gracias y alabanzas,
pedirte ayuda y perdón.
Qué lindo llegar cantando
a tu casa Padre Dios.


Qué lindo traer la vida
a nuestra celebración,
contarle a nuestros hermanos
y que se vuelva oración,
sudor, lágrima, esperanza,
trabajo, rezo y amor.
Qué lindo rezar cantando
la vida que se nos dio.

Qué lindo encontrar hermanos
que viven la misma fe,
y amando son serviciales
y esperando saben ver
que el Reino de Dios avanza
sencillamente y de a pie.
Qué lindo rezar cantando
el misterio de la fe.

Qué lindo saber que somos
una Iglesia comunión,
que nace con el bautismo
y crece con la misión
de unir entre sí a los hombres
y a la humanidad con Dios.
Qué lindo rezar cantando
y sentir la comunión.